DELETE es más que un grupo; es una declaración de intenciones, una ráfaga de energía creativa condensada en canciones que nacen, explotan y se desvanecen casi tan rápido como un pensamiento fugaz. Formado por figuras emblemáticas del punk rock argentino – Chino Biscotti (Cadena Perpetua), Gori (Fun People/Fantasmagoría), Santi (Pelea de Gallos) y Bati (Palladium86/Juventud Infinita) – DELETE se presenta como un proyecto donde la improvisación, la inmediatez y la visceralidad son las piedras angulares de su propuesta.
La premisa es tan simple como radical: entrar al estudio sin canciones pre-compuestas y dejar que la música fluya libremente, alimentada por la química entre los músicos y la urgencia del momento. Las canciones, concebidas y grabadas en un solo día, son complementadas con letras y voces en una segunda jornada. Sin adornos, sin pulir, sin concesiones. "Palo y a la bolsa," como dirían ellos mismos. DELETE es hardcore punk en su estado más puro, un torrente de adrenalina sonora que no se detiene a contemplar el paisaje.
Esta filosofía de trabajo, lejos de ser un capricho, define la esencia misma de DELETE. Se trata de entrar al estudio con la mente en blanco, dispuesto a dejarse llevar por la intuición, el juego y la empatía. La risa, el compañerismo y la búsqueda de la espontaneidad son tan importantes como la ejecución musical. El resultado es una música cruda, honesta y profundamente personal, que refleja la energía y la pasión de sus creadores.
Su segundo y nuevo EP lleva esta idea al extremo. En apenas 4:30/5 minutos, seis canciones estallan con una fuerza inaudita. Cada tema es un golpe directo al hígado, una descarga de energía que te deja sin aliento. Entre los tracks más destacados se encuentra la implacable "A cara de perro," un himno a la confrontación sin máscaras. La catártica "Higiene mental" es un grito liberador contra las presiones y las expectativas sociales. La oscura y enigmática "La reina blanca mata todo" nos sumerge en un ambiente inquietante y opresivo. Y la incendiaria "Ya vomité" es un manifiesto rabioso contra la hipocresía, la corrupción y los discursos vacíos de políticos y religiones. Completan el EP las potentes "Todo o Nada" y "El camarón", reafirmando la propuesta sonora concisa y contundente del grupo.
Este nuevo EP no es una excepción en la trayectoria de DELETE. Su primer EP, grabado en una intensa sesión de diez horas en Moscú Studio, ya sentó las bases de su sonido característico. Ocho canciones improvisadas, con una duración total de apenas ocho minutos, demuestran la capacidad del grupo para crear música impactante y memorable en tiempo récord. Desde el hardcore furioso de "Rati Nazi" hasta el happy punk desenfrenado de "Salgo enloquecido", pasando por el rock crudo y visceral de "666" y "Flor saqueo," el primer EP de DELETE es una muestra representativa de su ecléctica y explosiva propuesta.
DELETE es una bocanada de aire fresco en la escena punk rock argentina. Su música, efímera y visceral, es un recordatorio de que la verdadera esencia del punk reside en la honestidad, la energía y la pasión por la creación sin límites. Un proyecto que, a pesar de su brevedad, deja una huella imborrable en el panorama musical actual. Un proyecto que, como su nombre lo indica, está destinado a desaparecer, pero cuyo impacto resuena mucho después de su partida.
