1806 y 1807 los habitantes de Buenos Aires rechazaron los intentos británicos de asentarse en tierras del Virreinato de la Plata.
En ese momento, Bernardo Bonavía Zapata era el gobernador designado a las Islas Malvinas. También, estaba al mando de Puerto Deseado, en las costas patagónicas continentales. Allí se encontraba cuando se enteró que las fuerzas inglesas habían tomado la ciudad de Buenos Aires.
Temiendo que la toma de la capital fuera seguida por la de Malvinas, regresó a Puerto Soledad. En 1808, Bonavía felicitó al Virrey Liniers por el triunfo de las fuerzas españolas.
Cuando se produjo la Revolución de Mayo de 1810, la administración virreinal le adeudaba sueldos de su gobierno en las Islas Malvinas, qué jamás llegó a cobrar. En 1811, Bonavía fue remitido preso a España y condenado a muerte, pero logró salvarse y regresar a Buenos Aires.
A partir de 1813, el gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata lo incorpora a sus tropas prestando servicios en enclaves estratégicos de nuestro territorio. Participa, de este modo, en las luchas por la Independencia.
LA ASUNCIÓN DEL SEGUNDO PILOTO DE LA REAL ARMADA, PABLO GUILLÉN
En enero de 1810, el segundo piloto de la Real Armada, Pablo Guillén, asumió como el último gobernador de las Islas Malvinas y juró a Fernando VII con las ceremonias acostumbradas.
Tras la Revolución de Mayo, España resolvió reagrupar sus fuerzas y evacuar la lejana población. Desde 1767 hasta 1810, las Islas Malvinas fueron españolas de forma continua con veinte gobernadores y cumplieron 32 períodos ininterrumpidos de Gobierno, durante 43 años.
Desde 1810, las Islas Malvinas pasan a formar parte de los territorios de las Provincias Unidas.
La Primera Junta, primer gobierno patrio de Argentina tras la Revolución de Mayo del pintor español Julio de Vila y Prades |
LA PRIMERA PARTIDA PRESUPUESTARIA DEL NUEVO GOBIERNO
El 30 de mayo de 1810, el Presidente de la Junta de Gobierno, Cornelio Saavedra firma un decreto aprobando la partida presupuestaria que incluía el pago de sueldos, jornales y gastos de las Islas Malvinas.
Tras ese decreto, Malvinas pasa oficialmente a depender, administrativa y jurisdiccional, de la Junta de Gobierno de Buenos Aires.
FUENTE: MUSEO MALVINAS E ISLAS DEL ATLÁNTICO SUR.