“Tenemos todas las energías puestas en la canción porque se trabajó mucho para que la canción suene bien, trabajamos con el productor Dani Vila en la producción del tema musical, contamos con la participación de Ariel Puchetta y trabajamos en la producción del vídeo para que todo esté a la altura de lo que nosotros entendíamos que tenía que estar para la canción. Así que fue un trabajo arduo, aunque logramos obtener un resultado positivo”, manifestó el vocalista de “Lancuyen”, Claudio González, en conversación en exclusiva con A SUBIRSE A LAS TABLAS.
El vídeo clip de “Madre Mía” fue realizado en la quinta “Los Cipreses” de Ministro Rivadavia.
“Llegamos a “Los Cipreses” por intermedio de Federico, un amigo que trabaja en el salón, quien nos conectó con Iván. Cuando fuimos a verlo, nosotros le preguntamos cuánto nos cobraba porque entendíamos que podría cobrar una locación y teníamos ganas de filmar ahí, y él nos dijo que no cobraba nada por eso y que podíamos utilizar todas las instalaciones. De hecho, tratamos de aprovecharlo al máximo porque gran parte del vídeo se grabó ahí. Así que muy contento con “Los Cipreses” y con Iván”, contó el cantautor folclórico.
Ariel Puchetta, líder y vocalista de “Ráfaga”, fue el artista invitado para ponerle su voz en este homenaje a todas las madres.
“Walter, percusionista de “Lancuyen”, se juntaba a comer unos asados en la casa de unos amigos, donde Ariel fue varias veces, y en uno de esos asados Ariel le dijo “Che cuando quieran grabar algo, avisenme y todo bien”; entonces esperamos la oportunidad y creímos que está era la oportunidad y el momento, así que lo único que hicimos fue recordarle lo que nos había ofrecido y él encantado dijo que “sí, que no tiene ningún problema”. Cuando fue al estudio, tuvo la mejor predisposición. La verdad que se comportó de manera súper profesional, pero por sobre todo con una gran humildad y un tipo de bien, ya que estuvo muy bien predispuesto para trabajar en la canción. Se puso la camiseta y estamos agradecidos. Estamos muy felices con Ariel”, narró Cladio González.
Luego, reveló que “en principio también iban a grabar Richard Rosales, viola, y Mauricio, teclados, pero ambos viven en Tigre y San Nicolás, respectivamente, así que se complicaba un poquito grabar todo después, entonces decidimos que Ariel ponga la voz”.
Finalmente, González dejó una pequeña reflexión sobre la canción. “Me parece que lo que busca esta canción es ser un mensaje de esperanza y reflexión. A veces nosotros, los hijos, no le decimos con palabras lo que los queremos, respetamos, agradecemos nada más nada menos que la vida, tantas noches de desvelo, miedos por los que tuvieron que atravesar para cuidarnos”, reflexionó.
“Un amigo mío, que es músico, escuchó la canción y me dijo “terminé de escuchar la canción y me dieron ganas de llamar por teléfono a mi vieja para ver cómo estaba”; eso es el resumen de lo que la canción busca. Si tienes a tu mamá, no pierdas ni un segundo de decirle todas las cosas hermosas que le encantaría escuchar de tu boca como hijo, hija, y si tienes la desgracia de no tenerla mira al cielo, mira dentro de uno o a donde sea y agradecerle lo que ha generado en uno. Creo que siempre termina siendo algo positivo”, señaló.