Por Agustín Ochoa. Mariel Dupetit fue otra de las máximas figuras del tango argentino que participó del espectáculo “Preludio Porteño” en el Gran Café Tortoni.
“Con bastantes expectativas. En mi caso es la primera vez que me presentó acá en el Tortoni. La sala es preciosa. Realmente es pasar de siglo ya que entrar en ese lugar es como pasar de siglo. Y afortunadamente la sala ya está llena, entonces eso te da también un empuje, unas ganas de salir al escenario. Es importante”, manifestó la cantante de tango Mariel Dupetit en conversación en exclusiva con A SUBIRSE A LAS TABLAS.
Sobre el acompañamiento del público, Mariel Dupetit expresó: “Para un artista es fundamental. Nosotros lo hacemos siempre por alguien, o dedicado a alguien o tratando de transmitir nuestros sentimientos o que esa persona que te está mirando pueda sentir lo que vos estas pasando arriba del escenario”.
Y, agregó que “en el caso de Walter Ríos (esposo) que está cumpliendo 70 años con la música lo sabe mejor que nadie. Y lo más valorable es que él se sigue emocionando cómo la primera vez que estuvo en un escenario. Ya hace bastantes años que estoy al lado de Walter acompañándolo en el escenario y te puedo garantizar que eso sucede siempre ya sea en una sala de diez personas o en un teatro de dos mil o en el State de Francia con 80 mil personas cómo nos tocó presentarnos hace un par de años atrás. Es siempre encontrar el motivo dentro de ti para emocionarte y poder transmitir esas cosas que nuestros músicos y poetas nos han dejado".
Finalmente, Dupetit se refirió cómo nació el amor por la música de Astor Piazzolla. “Yo ya lo conocía a Astor antes porque soy de Mar del Plata y el venía con su grupo a Mar del Plata a tocar. Y éramos pocos los fanáticos, pero como buena estudiante de música íbamos a ver al monstruo de ese momento que admirábamos. Ya me conmovía su música, me tocaba, no sabía que pasaba, pero era movilizante. Cuando sale “Balada para un Loco” fue amor para siempre”, contó.
“Con bastantes expectativas. En mi caso es la primera vez que me presentó acá en el Tortoni. La sala es preciosa. Realmente es pasar de siglo ya que entrar en ese lugar es como pasar de siglo. Y afortunadamente la sala ya está llena, entonces eso te da también un empuje, unas ganas de salir al escenario. Es importante”, manifestó la cantante de tango Mariel Dupetit en conversación en exclusiva con A SUBIRSE A LAS TABLAS.
Sobre el acompañamiento del público, Mariel Dupetit expresó: “Para un artista es fundamental. Nosotros lo hacemos siempre por alguien, o dedicado a alguien o tratando de transmitir nuestros sentimientos o que esa persona que te está mirando pueda sentir lo que vos estas pasando arriba del escenario”.
Y, agregó que “en el caso de Walter Ríos (esposo) que está cumpliendo 70 años con la música lo sabe mejor que nadie. Y lo más valorable es que él se sigue emocionando cómo la primera vez que estuvo en un escenario. Ya hace bastantes años que estoy al lado de Walter acompañándolo en el escenario y te puedo garantizar que eso sucede siempre ya sea en una sala de diez personas o en un teatro de dos mil o en el State de Francia con 80 mil personas cómo nos tocó presentarnos hace un par de años atrás. Es siempre encontrar el motivo dentro de ti para emocionarte y poder transmitir esas cosas que nuestros músicos y poetas nos han dejado".
Finalmente, Dupetit se refirió cómo nació el amor por la música de Astor Piazzolla. “Yo ya lo conocía a Astor antes porque soy de Mar del Plata y el venía con su grupo a Mar del Plata a tocar. Y éramos pocos los fanáticos, pero como buena estudiante de música íbamos a ver al monstruo de ese momento que admirábamos. Ya me conmovía su música, me tocaba, no sabía que pasaba, pero era movilizante. Cuando sale “Balada para un Loco” fue amor para siempre”, contó.