El ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, fue invitado a participar de la Primera Reunión Virtual convocada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) como prolongación del Foro de Ministros de Cultura para compartir opiniones y observaciones sobre las repercusiones de la crisis sanitaria en el sector cultural, así como hablar de las políticas y estrategias que cada organismo está llevando a cabo en sus respectivos países.
TEXTO DE LA UNESCO
"La crisis sanitaria debida a la pandemia de COVID-19
puede afectar profundamente al sector cultural a nivel regional, nacional y
local a largo plazo. Las restricciones a la movilidad o las medidas de
contención adoptadas por muchos países para frenar la pandemia limitan
drásticamente el acceso a la cultura y debilitan el ecosistema cultural en su
conjunto. El cierre de los sitios del patrimonio y la infraestructura cultural
conexa, la cancelación o el aplazamiento de eventos y la interrupción de la
producción cultural tendrán importantes repercusiones económicas y sociales
para las industrias culturales y creativas. Dichas repercusiones crisis
debilitarán aún más las condiciones profesionales, sociales y económicas de los
artistas y los profesionales de la cultura, en particular de los empresarios
individuales y las pequeñas y medianas empresas, que a menudo no tienen la base
económica necesaria para responder a una situación de crisis de esta magnitud.
Este es el caso, en particular, de la artesanía, la música, el cine, las artes
escénicas e incluso la gastronomía. Así pues, este período de crisis conlleva
el riesgo de profundizar las desigualdades de acceso a la cultura y a la
diversidad de las expresiones culturales en el mundo. La crisis también puede
reducir la diversidad cultural y acentuar la tendencia a la concentración y la
estandarización en el sector cultural", afirma la UNESCO en su invitación
a participar de este encuentro virtual.
Del encuentro virtual participaron más de 150 ministros de
diferentes países que expusieron sus ideas a través de una plataforma digital
en vivo y en directo para todo el mundo.
PALABRAS DE BAUER
"Nos encontramos ante una pandemia que ESPANTA Y MATA. La cultura es sanadora. Desde ya que los conocimientos médicos para encontrar la vacuna para la cura forman parte del acervo cultural científico. Sin embargo, el arte también es sanador. Por eso hoy en día la actividad creadora es cuando más requiere del esfuerzo de los Estados, los artistas y los gestores culturales para mantenerla viva".
"En un mundo donde crecen discursos racistas y
xenófobos, anclados en el individualismo y la sospecha del otro, esta reunión
demuestra la vocación de la humanidad por salir adelante en conjunto. La
cultura una vez más se presenta como aquello que nos une y nos hermana, porque
nos incluye a todos y tiene un poder reparador que nos permite comprender que
el cuidado del otro y del planeta, es el cuidado más profundo de uno
mismo".
"Para el Ministerio de Cultura de la Nación Argentina
lo más importante es desarrollar una cultura de la solidaridad".
"Siguiendo este pensamiento decidimos poner la cultura al servicio del sistema de salud: Les estoy hablando desde Tecnópolis, uno de los espacios culturales más importantes de nuestro país, hoy transformado en una unidad sanitaria de internación destinada a tratar simultáneamente a más de 2500 enfermos leves de COVID-19".
"A su vez, hemos tomado medidas de ayuda económica para
centros culturales, organizaciones populares y proyectos comunitarios,
organizaciones sociales con base territorial, foros, asambleas y comunidades
indígenas, entre otros actores culturales. La situación de emergencia exige
contar con información rigurosa acerca de los efectos económicos y sociales
generados por esta crisis sanitaria".
"Por eso, el Ministerio de Cultura de Argentina
implementó una Encuesta Nacional de Cultura y elaboró un proyecto para la
medición de los efectos del COVID-19 en el campo regional con el apoyo de los
países del Mercosur Cultural ampliado que próximamente pondremos a disposición
de la comunidad internacional".
"Por último, en momentos en que los lugares de
encuentro están cerrados, exploramos nuevas herramientas tecnológicas,
desarrollando su potencia educativa y democrática, y apostando al protagonismo
de la ciudadanía y la comunicación entre los pueblos".
"Convocamos a la UNESCO a que trabaje mecanismos de resolución de la brecha digital. UNESCO debe hacerse oír en todo el sistema internacional, frente a los organismos financieros para luchar contra la pobreza desde su competencia. El salir fortalecidos como humanidad de esta crisis de nosotros depende".