En un acto organizado por la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y el Municipio de Avellaneda se descubrió un cartel en memoria de las víctimas del emblemático caso de violencia institucional.
Durante el homenaje, se inauguró una señalización en el sitio donde hace 27 años ocurrió el hecho que constituye un símbolo de la violencia policial y de la impunidad. Bajo el lema “Argentina unida contra la violencia institucional”, el cartel da cuenta de lo sucedido y recuerda a las víctimas del brutal crimen: Edgardo Cicutin, Norberto Corbo, Claudio Mendoza y Héctor Bielsa.
El sub-secretario de Derechos Humanos, Matías Moreno, comentó que “la violencia institucional es una deuda de la democracia. Quiero agradecer a los familiares por mantener vivo el pedido de justicia. Sabemos que la demanda permanente logra tarde o temprano la memoria, verdad y justicia”.
Luego, el funcionario provincial remarcó que “Nosotros como sociedad pudimos construir un Nunca Más a la dictadura cívica-militar, hoy los invitamos a construir entre todos y todas un Nunca Más a la violencia institucional”.
Por su parte, el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla, reflexionó que “para nosotros cada señalización representa la oportunidad de poder seguir creando conciencia en la ciudadanía de que no hay que olvidar y que hay que seguir exigiendo justicia”.
“Si no queremos más casos de violencia institucional, no podemos dar lugar a la impunidad. Un caso que quede impune es un posible caso de violencia institucional a futuro”, indicó.
A su vez, el intendente de Avellaneda, Alejo Chornobroff, manifestó: “Los familiares estuvieron 27 años luchando con mucha fuerza y eso fue ejemplificador, tengo la sensación de que el año que viene vamos a estar acá seguramente con el juicio ya iniciado. En el control permanente y en la formación en derechos humanos a los jóvenes de la fuerza policial está la clave para que estos hechos no se repitan”.
La "Masacre de Wilde" ocurrió el 10 de enero de 1994, cuando policías de la entonces Brigada de Lanús persiguieron a los ocupantes de dos autos, presuntamente al confundirlos con un grupo de delincuentes y los asesinaron a balazos.
Participaron del emotivo acto el Subsecretario de Derechos Humanos Matías Facundo Moreno junto al Secretario de Derechos Humanos de la Nación Horacio Pietragalla Corti, el intendente del Municipio de Avellaneda, Alejo Chornobroff, el Director Nacional de Políticas contra la Violencia Institucional, Mariano Przybylski, la Secretaria de Derechos Humanos de Avellaneda, Ximena Yacoy, el Director de Políticas contra la violencia institucional de la Subsecretaría, Ignacio Alvarez, el sobreviviente de la masacre Claudio Díaz y Raquel Gazzanego y Patricia De Angelis, viudas de Edgardo Cicutín y Norberto Corbo.