Fuente: Am 750 |
Por Agustín Ochoa. Víctor Hugo Morales es considerado por muchos estudiantes de periodismo como un referente debido a que la mayoría decidieron estudiar está profesión, ya que crecieron viendo al “uruguayo” conducir el noticiero de la mañana en Canal 7 o escuchando sus inolvidables relatos deportivos o leyendo algunos de sus libros. También es catalogado como uno de los grandes locutores y relatores en vigencia de toda Latinoamérica.
En una charla exclusiva con A SUBIRSE A LAS TABLAS, el reconocido y respetado periodista cuenta acerca de sus inicios en el periodismo y los recuerdos que tiene sobre sus primeros relatos deportivos; cómo se prepara para relatar los partidos durante la semana; revela cuál fue el otro momento emocionante que le tocó vivir en los mundiales; opina sobre la gestión de Jorge Ferraresi en Avellaneda, entre otros tópicos.
¿En qué momento de tu vida te diste cuenta que tenías que dedicarte de lleno al periodismo?
“Ni me di cuenta. Las circunstancias se fueron dando de esa manera. Empecé como locutor y un día me mandaron hacer algunas cosas al informativo y ahí empecé a tomar contacto con las noticias. En determinado momento era más de eso que de la locución. Después vino el tiempo de relator deportivo y eso directamente me metió de lleno en la tarea periodística. Más vinculado al deporte, pero sin perder de vista todo lo demás. Diría que no hay un momento preciso en el cual yo haya dicho “bueno, voy a ser tal cosa”, simplemente me fue pasando, sucediendo. Fui evolucionando sólo sin darme cuenta hacía a una pasión indudable, como la del periodismo”.
¿Qué recuerdos tiene de sus primeros relatos deportivos?
“Mucho nerviosismo. Temor de fallar los jugadores que nombraba. El deseo de encontrar las palabras que describiesen lo que estaba sucediendo. Mucho ensayo. Mucha vocalización. Me preparaba para tratar de hacer las cosas lo mejor posible. Tenía una gran obsesión y mucho miedo de que las cosas no salieran de acuerdo a cómo de los que me tenían confianza y pensaban que tenía que salir. Te diría que nunca perdí el miedo, pero cuando era mucho más joven era más paralizante que ahora”.
¿Cómo te preparas para los relatos durante la semana?
“Solamente me preocupa estar descansado porque lo demás está solo, ya está todo el material, todos los elementos que me permiten construir mi trabajo. Lo único que lo puede afectar, es no estar físicamente bien; no haber dormido bien; no tener la garganta o las cuerdas vocales en condiciones. Pero estando descansado te diría que ni me preocupo y hago mi trabajo con la naturalidad que cualquier persona ejerce su profesión”.
Uno de tus momentos gloriosos de tu carrera fue uno de los goles que convirtió Maradona a los ingleses, hoy considerado como el gol del siglo de los mundiales, pero si me tuviera que decir otro momento: ¿Cuál sería?
“Hay un momento también emocionante que es el gol de Caniggia a los brasileños en el Mundial de Italia ‘90. Creo que ese gol fue históricamente para mí como para el fútbol. Lo recuerdo como un momento muy decisivo de mi vida”.
¿Y cómo lo viviste ese partido inolvidable?
“El partido era aterrador. Íbamos charlando con Alejandro Apo durante el viaje hacía Turín y le decía, a cada rato, es imposible ganar y él se ría y me decía que no daba para tanto el miedo que yo tenía. Miedo en el sentido de pensar que el partido se perdía porque Brasil tenía un equipo bárbaro y el equipo argentino no andaba bien, no había jugado un sólo partido bien; por lo tanto no había muchas posibilidades. Con lo cual cuando hay un quiebre de ese tipo, entre el temor que tenes por algo y que las cosas salgan muy bien, la felicidad fue enorme. Lo recuerdo como uno de los días más felices que se hayan presentado en mi vida profesional”.
¿Cuál fue el hecho que marcó un antes y un después en tu carrera como relator deportivo y periodista?
“El gol del Diego a los ingleses es la bisagra de mi vida y no solamente en lo profesional, sino que también en mi vida como enamorado de una profesión de la que vivo, porque todo después fue mucho más importante. La realidad mía tiene mucho que ver con ese gol”.
Sos una de las grandes figuras que siempre es invitado a participar de alguna actividad cultural por las autoridades del Municipio de Avellaneda. ¿Qué opinas sobre que en este distrito promueva la cultura y acerque personalidades destacadas del periodismo a su comunidad?
“Cada municipio está obligado a promover eso. Todo el que mueva la cultura; las relaciones sociales de cada zona donde se tiene autoridad política, me parece que los dignifica. Avellaneda es una ciudad importantísima. Participó mucho porque soy asiduo concurrente del Teatro Roma, por ejemplo. De verdad que es impresionante el recorrido que hace en términos culturales. He visto hacer muchas cosas en Avellaneda en los últimos tiempos, como la instalación de monumentos, esculturas, entre otras. Todo eso más la forma en la que está Avellaneda en este momento, que me deslumbró por su limpieza; las calles totalmente asfaltadas; y calidad de vida, me parece que es natural que eso se corresponda con una tarea cultural muy valiosa, como la que están haciendo”.
Justamente, una de las decisiones políticas que tomó Jorge Ferraresi fue la recuperación y puesta en valor del Teatro Roma.
“Siempre fui al Teatro Roma desde hace treinta años. Pero en algún momento empezaron los deterioros; esa sensación de abandono en los teatros; y cuando empezaron hacer las tareas, me sentía ya muy agradecido, pero cuando vi el resultado de esas tareas me quedé deslumbrado. La labor realizada con el teatro; la sala; el escenario; los camerinos, lo puso en un altísimo nivel digno de Avellaneda”.
¿Qué análisis hace acerca del momento que está atravesando los periodistas en este momento?
“Muy desencantado. El periodismo está ejercido y dominado por medios muy hegemónicos, que tienen intereses económicos y están vinculados a poderes demasiados grandes que les impiden hacer un periodismo serio. Por supuesto, eso convive con un montón de periodistas que tratan de que nuestra profesión esté a salvo. Se consiga eso o no siempre habrá periodistas que amen esta profesión y merecen mis respetos.
Pero la etapa que atravesamos desde hace diez años, es muy dura en cuanto al comportamiento de esos medios que llamamos hegemónicos y normalmente actúan en política y en nombre de la libertad de expresión, pero que no hacen honor a eso, sino que califican tan sólo por los intereses que la dominan”.
¿Cuál crees que sería la solución para salir de está situación tan crítica del periodismo?
“La Ley de Medios hubiese sido una solución bastante, no total, del problema. El fracaso de la Ley de Medios por el enorme poder que había que enfrentar, a mí me ha dejado sin muchas esperanzas de que las cosas puedan hacer diferentes en el corto plazo. Pasarán muchos años antes de que esto cambie”.
Un compositor de Banfield llamado Pablo Sensottera le compuso una canción. ¿Cómo se siente de que los artistas lo homenajeen?
“Tengo mucho amor por los artistas. Por lo tanto, todo lo que recibo de ellos me parece que es lo más lindo que me puede pasar. El mimo de un artista, el reconocimiento de alguien especialmente sensible como es un artista, a mí me toca siempre el corazón. Así que esa manifestación de cariño, afecto y respeto de Pablo más todo lo que han hecho otros artistas, me hacen sentir reconocido y agradecido a la vida porque la verdad hasta parece exagerado que me hayan dedicado una parte de su arte a mi persona, pero hecho eso no puedo menos que reconocer y agradecer”.
Breve reflexión sobre el lugar que ocupa el periodismo en su vida.
“Es mi vida. Pivoteo en torno a mi condición de periodista hacía todos los aspectos de la vida. Así que para cualquier persona que tiene la suerte de amar esta profesión y ejercerla, la vida se le abre de otra manera. Después están los sobresaltos de la vida, pero en líneas generales hay una línea muy generosa, como esas líneas que se leen de la mano y dice que está persona va a estar feliz y contento con lo que hace. A mí la línea del periodismo me ha marcado muy positivamente en todo lo que hace a mi vida”.
La entrevista se realizó un día de octubre del 2021 en los estudios centrales del canal C5N. Fue uno de los momentos más gloriosos de mi vida porque entrevisté en persona al profesional que me inspiró a ser lo que soy hoy en día.
Me enamoré del periodismo cuando miraba el noticiero de Canal 7 antes de ir a clases. Parece mentira que a un niño le despierta esa pasión por comunicar desde muy temprana edad, pero así fue. Será por siempre mi mayor mentor periodístico y le voy a estar agradecido porque le dio sentido a mi vida adulta.