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Foto Archivo |
Por Juan Carlos Roldán (periodista de la Secretaría de Comunicación Social de Lanús). Uno de los mejores intérpretes de tango que han surgido en
los últimos años y poseedor de una bellísima voz, es Hernán Genovese. Tanguero
a rajatabla en algunos temas, orillero de la canción en otros, “según la
intención de cada obra”, el cantante admite que su gusto se extiende a otros
géneros como “el folclore, la música clásica y el bolero”. “Pero -sentencia- el
tango es mi columna vertebral.” Genovese prefiere marcar distancia con el
estilo de quienes, de un tiempo a estos días, arribaron al tango desde las
tierras del rock.
En esta entrevista realizada por el periodista Juan Carlos
Roldán de la Secretaría de Comunicación Social lanusense, este vecino de Lanús
nos relata su experiencia como cantante en el mundo del dos por cuatro, un
ámbito donde a pesar de la fama mundial y el culto que se le brinda a nuestra
música ciudadana en todo el mundo, en el país no tiene siempre un espacio
acorde a su gloria y a lo que significa en el sentir de los argentinos.
Naciste en 1972, lo que quiere decir que tu adolescencia
transcurrió con el auge del Rock Nacional de los 80. En ese contexto ¿Cómo fue
que elegiste el tango como modo de expresarte?
Es verdad, pasé mi adolescencia en la época de esplendor del
rock nacional, pero soy Rara Avis. Mis influencias musicales siempre estuvieron
cerca del tango a través de mi familia paterna ya que, en las fiestas
familiares, allí en Lanús, había muchos grandes cantores y músicos aficionados.
Mi viejo y mi abuelo me hicieron escuchar tango desde chico así que fue mi
música de una manera natural. Aprendí ese repertorio y mi vocación musical se
vio canalizada en ese género. Se fue dando de manera natural sin que hubiera de
mi parte ninguna elección. Cuando me empezó el momento de escuchar rock, yo ya
estaba tan imbuido de tango que hasta me parecía una música extraña el rock. Si
bien era imposible no escucharlo nunca me resultó interesante musicalmente y
nunca ahondé en ese género.
¿Crees que el rock
argentino tiene ADN tanguero?
Por haber nacido en la misma ciudad donde nació el tango y
por tratarse además de dos músicas inminentemente urbanas, hay algo del tango
que se cuela en el rock argentino. No me resulta cómoda la denominación del
rock nacional. Pienso que el rock tiene una matriz importada inglesa o
norteamericana que está íntimamente ligada al idioma inglés. En las inflexiones
de los cantantes que cultivan el rock en Argentina se nota una influencia que
imita ese idioma. De manera que yo no creo que en el ADN del rock esté el
tango, pero si influencias de la idiosincrasia porteña que están presentes en
ambos géneros ya que como te dije son dos corrientes urbanas que nacieron en la
misma ciudad y van a tener siempre cosas en común, en el lenguaje, en el clima,
en cierto color, gris, pero que en el ADN está más y rock inglés más que el
tango.
Sos referente de una camada de nuevas voces que ha tomado
el tango como un lenguaje propio para contar cosas actuales, pero podemos
hablar de un tango joven?
No me propuse ser un referente, pero de ser así, eso indica
que venimos haciendo bien las cosas. Ojalá que a alguien le sirva la referencia
del trabajo de uno. Hay mucha gente joven haciendo tango, aunque no sé muy bien
que significa la existencia de un tango joven. Me gusta pensar el tango como un
género que ha tenido continuidad y evolución a través de más de cien años de
historia y no es igual lo como concebimos hoy y está bien que suceda eso.
Significa que es un género en movimiento, que es dinámico y que tiene mayores
posibilidades de sobrevivir. Pero también hay una matriz que identifica al
tango como tal y debe estar presente para que siga siendo lo que es. Piazzolla
fue un renovador y antes de él existieron otros renovadores. Siempre y cuando
exista una matriz el tango evoluciona y eso es muy bueno que suceda. Ya no nos
vestimos como los compadritos de 1920. Los tiempos cambian y me parece que está
bien que tenga una estética urbana acorde a la actualidad. Estoy en contra de
los shows que parecen postales de otra época. La poética habla siempre de los
mismos temas, la muerte, el paso del tiempo, el desarraigo, el amor. Siempre
son los mismos temas desde Shakespeare y mucho antes de él hasta nuestros días
y el tango trata esos temas y lo hará con el lenguaje que la época proponga.
En medio del trap, de la música electrónica, del reggaetón,
¿cómo se hace para atraer a la juventud al tango?
No tengo la respuesta, ojalá la tuviera, porque tendría
mucho más público y joven. Uno tiene que estar actualizado con los nuevos
medios, con las plataformas digitales de difusión. El tango tiene las puertas
cerradas en la televisión argentina y es lamentable que sea así además no tiene
apoyo económico estatal. Si bien uno puede tocar temáticas actuales y de hecho
es lo que hacemos, no podemos hacer muchos milagros. El tango se ha convertido
en una música de culto y de elites intelectuales. La degradación del tejido
social hace que una música en la que la poética es compleja sea mucho más
difícil de aceptar en las masas. Es mucho más fácil el reguetón, es una música
instintiva que lleva a mover el cuerpo y nada más. El tango es muy complejo,
requiere un entrenamiento tanto como para ejecutarlo como para disfrutarlo. En
la medida que la educación es más deficiente va a ser muy difícil que la
juventud lo acepte. Hay excepciones, pero el tango se convierte en música de
elites, lo que me parece muy lamentable.
¿Con qué otros géneros musicales dialogan el tango?
El tango dialogó siempre con las músicas populares del
mundo. En primer lugar, el Jazz. Existen enormes influencias de ese género en
el tango. Otra música popular es indudablemente con el flamenco. Hay artistas
de ambos géneros que han cruzado las fronteras. El Fado portugués también tiene
mucho que ver, la música brasilera especialmente la del sur, se acerca a la
milonga y tiene grandes parentescos. Dialoga el tango también con el bolero y
con la música lírica. Podríamos decir que el tango es una ópera en tres
minutos. El público de la lírica eran los italianos desterrados de su patria
que en nuestra tierra escuchaban ópera y luego comenzaron a escuchar tango. Una
música urbana de inmigrantes. El tango dialoga a sí mismo con la milonga sureña
y con los géneros folclóricos de la llanura. Dialoga con la música de Cuyo. Hay
una gran cantidad de músicos mendocinos que descollaron en el género, Alberto
Podestá, Jorge Durán. El tango dialoga con muchas músicas del mundo y también
con el rock nacional, por supuesto.
¿Con qué tango te
sentís identificado?
Si tengo que elegir uno que no se de mi autoría, elegiría La
Ultima Curda. Me parece el mejor de todos, el más logrado. El más profundamente
tanguero, con una música maravillosa. Creo que es el tango cantable que se haya
escrito jamás. Es una obra en la cual el poeta le habla al bandoneón y le pide
a él que le cuente sus penas entre un vaho de alcohol, como corresponde. Todo
esto está hecho de una manera tan maravillosamente poética y rematada con una
música tan porteña, tan profunda y bella que compuso Aníbal Troilo que me
parece una obra insuperable.
Contanos ¿qué te inspiró componer un tango a la ciudad de
Lanús?
Simplemente porque
nací aquí. Amo a esta ciudad que remite a mi infancia. A mis abuelos amados, a
mi padre amado. A esas fiestas familiares en las que el tango siempre estaba
presente, a las canciones gallegas cantadas en dialecto. Todo eso es lo que la
palabra Lanús significa para mí además de mi pasión futbolera por el granate,
que está presente en el tema y tiene un giro futbolero en el final donde dice:
“Una flecha granate que hirió mi corazón”. El almacén de la esquina donde mi
abuelo vivía allí en la calle República del Líbano que antes se llamaba
Lafayette, a media cuadra de Rodríguez o Arenas, como la llamábamos, en fin,
todo eso que es lo que hace que cualquier poeta del mundo les escriba a sus
pagos, el lugar de su querencia.
Para leer la entrevista completa pueden ingresar al
siguiente link: http://www.lanus.gob.ar/archivos/fichas/entrevista-genovese.pdf